José está plenamente dedicado al retrato, empezó con un retrato de un cura, el padre Juan, que él confundió con el que era el padre Ángel. El padre Juan ha fallecido hace muy poquito, pero antes de que lo hiciera ocurrió la anécdota que voy a contar. José buscó al supuesto padre Ángel y fue a llevarle su retrato, sin saber que se estaba confundiendo de persona, pues él pintó al padre Juan. Al mostrar el retrato al padre Ángel ambos rieron juntos al darse cuenta de su confusión, pero el padre encargó a José un segundo retrato, de un niño al que éste adora.
Después de este retrato llegaron los siguientes: Un matrimonio amigo y el mismo padre Ángel con otro niño en brazos.
Iremos colocando aquí todos los retratos...
Después de este retrato llegaron los siguientes: Un matrimonio amigo y el mismo padre Ángel con otro niño en brazos.
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